Filtro de carbono (2uds.) de larga duración compatible con Faber 112.0185.278

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Filtros de carbono activo Longlife para campanas de recirculación
Un filtro de carbono activo ayuda a purificar el aire en la cocina. Filtra la grasa y los olores de los alimentos, neutralizando los malos olores. La acumulación de grasa en la cocina se puede reducir considerablemente cambiando el filtro de carbono con regularidad. Su entorno será más saludable y el riesgo de alergias disminuirá.

Un filtro Longlife, a diferencia de un filtro de carbono estándar, se puede limpiar y reutilizar repetidamente. Esto beneficia tanto a su bolsillo como al medio ambiente.

Dependiendo del uso de la campana extractora, el filtro debe limpiarse cuatro veces al año. Si no lo hace, las partículas de carbono se saturan y pierden su efecto.

Simplemente puede poner el filtro en el lavavajillas y limpiarlo en el ciclo más caliente. Luego, golpee suavemente el filtro. Luego, seque el filtro a temperatura ambiente en posición vertical para que el agua pueda drenar. Como alternativa, se puede colocar en un horno a 50 ° C. Limpie el filtro en un lavavajillas vacío. Esto evita que los restos de comida queden atrapados en el filtro. Estos ya no se pueden eliminar. Use un detergente para lavavajillas normal para esto.

Este filtro debe reemplazarse después de 3 años, ya que su capacidad de absorción se ha reducido demasiado.

Finalmente, el filtro de metal debe limpiarse una vez al mes, de lo contrario el flujo de aire en la campana se verá afectado debido a la acumulación de grasa y otras sustancias.